''No hay noche que no vea el día''
William Shakespeare
¿En qué consiste?
La búsqueda incesante y últimamente obligada de la felicidad, sumada al ritmo de vida que llevamos con más responsabilidades de las que cualquiera podría sobrellevar, nos conduce a un estado de sufrimiento y confusión que muchas veces deriva en un trastorno psicológico.
La terapia individual para adultos se dirige y se focaliza en el problema que trae el paciente, se evita analizar otros aspectos de la persona que no estén directamente relacionados con el motivo de consulta, a menos que la persona lo solicite. Por lo tanto se centra en saber cómo funciona el problema y no tanto en el por qué o cómo se creó. En nuestro método no realizamos una larga fase de evaluación cuya intención es diagnosticar clientes. Por el contrario, nos centramos en la fijación de objetivos y soluciones a los problemas del consultante.
La TBE es una terapia eficaz y breve que resuelve problemas complicados a través de soluciones aparentemente simples. A diferencia de otras orientaciones psicológicas, nuestro modelo «no busca entender el mecanismo de una cerradura que no funciona, ni su naturaleza en sí, busca conseguir la llave que funcione”.
¿Cómo vamos a trabajar?
Durante la primera sesión definiremos el problema o dificultad y estableceremos los objetivos terapéuticos.
En cada sesión se evaluarán los avances conseguidos, los encuentros se harán cada quince días y progresivamente, se irán espaciando en el tiempo (mensuales, bimensuales, trimestrales, etc.)
Las intervenciones se planifican para máximo 12 sesiones dependiendo del problema, sin embargo, la mayoría de las veces el problema se resuelve antes de la 7° sesión.
Es necesario aclarar que si no vemos resultados se interrumpe el tratamiento.
Problemas que tratamos
Para nosotros, ayudar a los clientes a superar sus barreras es una tarea noble.
